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Playas de la Isla de Balmoral

Playas de la Isla de Balmoral

Playas de la isla de balmoral

Se convirtió en residencia real en 1848 cuando la reina Victoria y el príncipe Alberto decidieron pasar el verano allí. Al encontrar el castillo adecuado a sus necesidades, el príncipe Alberto decidió ampliar el edificio, tanto que la primera piedra de la ampliación fue colocada por la reina Victoria en 1853. Dado el paso de la generación, la propiedad se expande ahora en unos 260 kilómetros cuadrados. A lo largo de sus vidas, la reina Isabel II y el duque de Edimburgo lo utilizaron como residencia privada de verano.

El Castillo de Balmoral no es de ninguna manera una «residencia real», ya que la residencia real oficial es el Palacio de Holyrood en Edimburgo (cuando la Familia Real está en Escocia). Aunque las unidades oficiales del Ejército de la Corona sirven como guardia en Balmoral, el castillo sigue siendo una residencia privada de la Familia Real y el Soberano no lleva a cabo ninguna actividad pública oficial allí, como es el caso en el Royal Lodge en Sandringham. El castillo está abierto al público para visitas en los meses de primavera y verano (pero no desde el 31 de julio hasta principios de septiembre aproximadamente, cuando está presente la Familia Real).

Cerca del corazón de la capital comercial de las Bahamas, Nasáu, se encuentran la Isla de Balmoral, un lugar de paz y belleza paradisíaca que le conquistará con su belleza infinita y sus playas. Fina arena y aguas cristalinas. Aquí es donde debes venir si quieres relajarte en una tumbona, practicar deportes acuáticos o jugar al voleibol de playa.  Si siempre has soñado con nadar junto a los delfines o las rayas, esta es tu ocasión.  Se puede llegar al lugar en ferry desde Nasáu y, para los que no lo sepan, fue uno de los escenarios de “Help!”, una película de los Beatles de 1965.

Imágenes de fotos de Playas de la isla de balmoral

La zona también está equipada con instalaciones, piscinas, sombrillas, cabañas, piscinas naturales y un mercado lleno de pequeñas tiendas donde se puede comprar comida, souvenirs o alquilar equipos de deportes acuáticos. Balmoral también ofrece un pequeño tour para nadar con los cerdos de la isla: una divertida experiencia de 30 minutos junto con estas curiosas criaturas.

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