Manuel Antonio, Puntarenas (Pacífico)
Las playas del Parque Nacional de Manuel Antonio son de las mejores del país. Tanto el parque como su costa son los destinos más populares de Costa Rica. La zona está protegida y cuenta con cuatro playas muy bonitas: Espadilla Sur, Manuel Antonio, Escondido y Playita.
La playa Manuel Antonio es la más famosa del país, tiene una perfecta forma de herradura y sus colores son impactantes. Combina el verde oscuro del follaje, con el blanco de la arena y el azul de sus aguas. Tened en cuenta que al ser un espacio protegido la entrada de turistas está limitada a 600 los días laborales y a 800 los festivos.
imágenes de fotos de MANUEL ANTONIO
Entre la ciudad principal y el parque nacional, hay varias playas de clase mundial en las que se puede disfrutar de una amplia variedad de actividades como natación, caminatas al Parque Nacional Manuel Antonio, surf o simplemente relajarse mientras ve una asombrosa puesta de sol.
Manuel Antonio es uno de los dos únicos lugares en Costa Rica donde se pueden ver las cuatro especies de monos de Costa Rica: araña, aullador, cara blanca y el mono ardilla el cual se encuentra en peligro de extinción. Muchos de estos monos pueden ser vistos desde la ventana de su hotel.
El área es también un excelente destino para observar perezosos, tanto dentro como fuera del parque nacional. Esta que una vez fue una pequeña ciudad ha florecido como uno de los lugares de playa más populares en Costa Rica.
Están disponibles todas las comodidades que esperaría encontrar, así como una animada vida nocturna. El acceso a la zona es posible a lo largo de la carretera costera 34, ya sea desde el norte o sur.
El viaje por esta zona es popular entre los turistas ya que posee una vista asombrosa de acantilados donde chocan las aguas azules del Océano Pacífico. También hay una pista nacional de aterrizaje en Quepos, a sólo 7 kilómetros de distancia.
Asegúrese de estar atento a los objetos de valor en todo momento; el robo es un problema considerable en las playas, no sólo por los seres humanos, sino también por los monos cara blanca que están listos para robar un bocadillo fácil.
